Me dediqué a echarle un vistazo a la programación infantil de Multimedios, verdaderamente no tengo palabras para describirlo, pero lo intentaré.
Para empezar quedé perpleja al ver a Doña Elizabeth haciendo el ridículo brincoteando o tratando de hacerlo graciosamente, sobre todo por que se nota que batalla para moverse, teniendo que aguantarle sus desplantes y su linda voz tan armoniosa que tiene, y con su insufrible frase “apóyame manito”, nefasto, pobres niños.
Es bien sabido que los invitados a La Casita de las Muñequitas son niños que pagan por alguno de sus exclusivos shows, fíjense que me platicaron que ahora han tenido que bajarse de categoría permitiendo que las “mamis” hagan la fiestecita de sus querubines en su humilde hogar, antes exigían que fuera la fiesta en algún salón infantil, y antes de iniciar su magnífico show dedicado a los “papis” digo a los niños, exigían el pago total de sus servicios.
Pasan los años y las Muñequitas Elizabeth cambian de personal y botargas tan rápido como pasan los días, las únicas inmortales son Elizabeth y Ana Celia, que definitivamente esa mujercita ridícula fingiendo su voz de niña malcriada ya perdió un tornillo, dicen ex empleados de ellas que últimamente se le olvida que no ésta en el escenario porque todo el tiempo habla y actúa como si estuviera interpretando a uno de sus personajes, ¿Tendrán ese mal de familia?, porque ni Elizabeth ni el Papirri están muy cuerdos que digamos.
Bueno aquí la cosa es que Multimedios no la corre porque ella paga al canal para salir al aire, entonces prepárense generaciones siguientes, tendrán muñequita Elizabeth hasta que la señora no pueda ni moverse, o tal vez reinvente su programa y aparezca sentadita y arrugadita en una mecedora gritando, y humillando a sus botargas.
Esperancita Berrones
