Las fiestas decembrinas, las posadas y la Navidad ya están en la puerta, siendo para muchos sinónimo de felicidad y de compartir, en donde el reecuentro con amigos y seres queridos está a punto de comenzar, sin embargo para muchos comienza un sentimiento de miedo.
El planear las comidas y cenas de la fiestas, la compra y envoltura de regalos, suelen también traer consigo un estrés, sobre todo si dejamos a última hora los preparativos y no se toman con calma los compromisos, ya que la rutina diaria se verá afectada.
Según estudios el 44% de la población mexicana la época decembrina les produce un aumento generalizado de angustia y estrés, incluso uno de cada cinco mexicanos sufre el ya famoso «estrés navideño«, sin embargo hay maneras de evitarlo y aquí te las compartimos:
1. Lo primero es la organización, esa es la clave para evitar angustia, debes programar y calendarizar tus fiestas y posadas, así como llevar una lista de todo lo que necesitas comprar para la cena navideña.
2. Lo ideal para las compras de regalos es hacer una lista de las personas a quienes se los comprarás, por supuesto comparando precios y no excederte en gastos, recuerda que el detalle es lo que importa.
3. Esto es muy importante para evitarte estrés, aprende a decir NO, debes tener orden en prioridades y dar importancia a aquellas que en realidad necesiten de ti, y no acceder a cosas o situaciones que sabemos nos harán daño y no podemos manejarlos, huye del perfeccionismo y simplifica.
4. Cuídate en las cenas familiares, sé positivo y evita los temas que pueden ser comprometidos y conviertan la reunión familiar en momento incómodos, que por supuesto no queremos pasar, trata de tener una conversación de recuerdos agradables, no te metas en situaciones que sabes que terminarán con la fiesta, olvídate y no provoques una de las populares disputas familiares que año con año se llevan a cabo.
5. Es muy importante que no te olvides de ti, si tu eres feliz, y estás relajado/a y lo tienes todo bajo control, transmitirás tus sentimientos a todos a aquellos que tienes a tu alrededor. Algo que debes reservarte exclusivamente para ti, es tu propio espacio para descansar y relajarte, disfruta de los villancicos, de una buena película o simplemente utiliza el tiempo que te estás regalando para que tu mente y tu cuerpo recarguen energía para el próximo año.
No debes olvidar que la Navidad también es una época de nostalgia y de recordar a todos aquellos que ya no están con nosotros, por lo que hay que seguir sonriendo y afrontar las celebraciones con la mejor sonrisa posible y evitar a toda costa el «estrés navideño».
Regiando
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